Hace unos cuantos años el concepto de domótica era todavía percibido como una quimera y de difícil adopción. La exigencia de vivir un “nuevo mundo” cómodamente desde casa resulta ahora al alcance de muchos.
En una sociedad que cambia de manera rápida y repentina, la necesidad de automatizar y, en consecuencia, mejorar la gestión del hogar resulta esencial. El mundo doméstico, por lo tanto, puede asumir un aspecto diferente gracias a la evolución a la que se somete con el fenómeno de la domótica. Por estas razones el hogar con sus dispositivos smart favorece de manera natural el confort del individuo residente.
El camino desde una casa analógica hacia una digital no es muy grande, y se puede realizar cómodamente conociendo un poco más de ese interesante mundo.
La Domótica, para los que todavía no la conocen, consiste en una disciplina que se ocupa de estudiar tecnologías para incrementar la calidad de la vida en los edificios: se mejoran las instalaciones ya existentes perfeccionando las prestaciones. La gestión coordenada de todos los dispositivos da la posibilidad a los elementos de obrar recíprocamente, controlados por un único punto de supervisión. Por todas estas razones, queda bastante claro que las potencialidades de la Domótica son enormes y de múltíples aplicaciones.
Un paso atrás
Un ordenador que medía el equivalente a la pared de una habitación fue el primer intento de Domótica en el año 1966. Era capaz de controlar televisión, despertador o la temperatura del hogar. Su nombre era ECHO IV y estaba formado por cuatro grandes cabinas del peso de 360 kg. El sistema incluía una unidad de procesamiento central (CPU), obtenida gracias a los circuitos excedentes de la computadora de control de procesos industriales Prodac-IV de la empresa Westinghouse.
James Sutherland trabajó como ingeniero de procesos para la compañía estadounidense y se interesó en la construcción de un ordenador exclusivo para los hogares. El ingeniero se llevó a casa dichos módulos y fue capaz de realizar el sistema en menos de un año. Diferentes teclados y terminales permitían una interacción directa de la mujer de Sutherland y de sus tres hijos. El sistema fue operativo desde el 16 de abril del año 1966.
ECHO IV
Sus características sin duda alguna eran bastante diferentes de las de un normal ordenador de hoy:
-Los números de módulos del circuito eran alrededor de los 120, con 16 clases diferentes.
-Velocidad del procesador: 160 kHz aprox.
-Magnetic-core memory: 8.192 palabras a 15 bits
-El consumo del sistema era de: 3 kW.
Gracias a este potente ordenador el sistema podía despachar tareas domésticas interesantes aptas a mejorar el día día de los habitantes del hogar.
La interacción con ECHO IV se obtenía por varios medios como el panel general que tenía una serie de interruptores para manejar, además de un teclado y un lector de cinta de papel que el programador podía utilizar. Pero una de las funciones más importantes sin duda fue el procesador de texto que podías usar con la posibilidad de almacenar en su memoria texto escrito. Posteriormente podías volver a entrar en el documento y editarlo añadiendo cambios de formato. Se trata del primer programa para la escritura que en la mitad de los años 70 fue utilizado por algo innovador.
En 1975 se utilizó ECHO IV para formatear un libro académico de 516 páginas sobre las encuestas de concesiones de tierras posteriores a la Guerra Revolucionaria.
Existía también un programa muy interesante sobre la educación con funciones matemáticas apto para aprender. Asimismo, se podía controlar fácilmente la alimentación del estéreo, controlar la televisión, poner música, despertador y generar tonos de audio.
Entre otras funciones bastante exclusivas para los años en los que el sistema actuaba, resaltaba la posibilidad de llevar a cabo un seguimiento del inventario de bienes de la casa, almacenar recetas o incluso anotar la lista de la compra.
Todo esto se podía hacer cómodamente desde la cocina con una consola que era una máquina de escribir IBM 735 Selectric basada en procesamiento de texto, como hemos explicado anteriormente. Dejar mensajes y notas a los otros miembros de la familia también fromaba parte de las funciones del sistema.
Sutherland tenía en mente muchas más funciones, pero por falta de tecnologías en aquel entonces no se pudieron llevar a cabo. Lamentablemente este sistema al ser demasiado grande, impedía un uso cómodo y correcto, y por esta razón nunca pudo triunfar.
ECHO IV aunque no tuvo surte llamó la atención de varios investigadores que empezaron a trabajar en la idea. Podemos decir que ese gran aparato sentó las bases de lo que sería la domótica actual, que desde aquel entonces emprendió el largo camino hasta los días de hoy.
Domótica en la actualidad
La domótica en la actualidad es un ecosistema de dispositivos conectados entre ellos utilizados por parte los ciudadanos smart. Esta tecnología juega un papel muy importante porque es capaz de regalar inteligencia a sistemas que no podrían valerse por sí mismos. La unidad de control puede gestionar sistemas de iluminación, telefónicos, audio, vídeo, climatización… así como una puerta eléctrica o una piscina. Todo esto se controla cómodamente gracias a un touch pad de mesa, wireless o empotrado en la pared. También a través de los smartphones podemos interactuar con el sistema.
Las aplicaciones de la Domótica son muchas y más inteligentes de lo que pensamos. hagamos un repaso de éstas.
– Iluminación
Gracias a un sistema de domótica podrás automatizar tu casa o piso. Se podrá, por lo tanto, gestionar el encendido y apagado de las luces; asimismo podrás regularlas para evitar, por ejemplo, fluctuaciones repentinas y molestas. Además, las luces se utilizan también para la anti intrusión, útiles a detectar la presencia de cualquier individuo en el ambiente.
Otro tema importante es la electricidad y la gestión de los consumos. Gracias a esta tecnología, a través del panel de gestión o de un smartphone, se puede fácilmente controlar los consumos de forma diaria y semanal, evitando costes innecesarios y obteniendo un ahorro energético.
– Climatización
El gasto energético de un hogar también se mide por las temperaturas que queremos producir dentro del inmueble. Obtener un microclima dentro de nuestra casa gracias a la domótica resulta muy fácil, pudiendo subdividir el sistema en diferentes zonas climáticas. Todo eso dependiendo de la habitación, del horario y de la orientación e irradiación solar, apto a aumentar el aislamiento térmico del edificio. Por esta razón, optimando las temperaturas también optimizaremos las facturas.
– Vídeo y Audio
Otra aplicación que destaca es la videofonía y la difusión del sonido. Con esa tecnología existe la posibilidad de obtener intercomunicaciones desde una habitación a otra en la casa. También se puede comunicar con la parte exterior del inmueble visualizando quién entra y accionar la denominada electro cerradura.
Asimismo la difusión del audio en las varias habitaciones será una tarea ejecutable de manera local o centralizada, que te dará la posibilidad de comunicar efectuando llamadas microfónicas. Añadiendo a todo eso la posible utilización de vídeo vigilancia, podremos ver y escuchar lo que pasa en otra parte de la casa. Esta opción es muy válida por ejemplo para controlar los niños en otra habitación, garantizando un control superior.
– Seguridad
La seguridad de los inmueble al día de hoy es un tema muy delicado y la domótica nos puede ayudar de manera contundente. Los sistemas de alarma que comprenden esta tecnología nos pueden avisar con un simple mensaje a nuestro móvil si hay fugas de gas, monóxido de carbono, fuego o agua. Una vez que el sistema está en funcionamiento, a parte avisarnos, cerrará las válvulas de gas o agua. Además se puede efectuar cómodamente el control perimetral y volumétrico de una habitación, implementando la seguridad en áreas especificas.
– Exteriores
Las personas que poseen casas con zonas ajardinadas podrán contar con un sistema que agilizará los procesos. La automatización del riego del jardín es un ejemplo. Resulta así más fácil con la posibilidad de programar según los horarios de cada día. Sensores de humedad y de lluvia avisarán el sistema que de manera autónoma sabrá cómo comportarse. Además, gracias a los sensores se podrá gestionar la iluminación, teniendo en cuenta parámetros como los horarios y las condiciones atmosféricas.
En conclusión podemos afirmar que la Domótica es un sistema que ofrece un ahorro de energía generalizado y a su vez proporciona simplicidad y continuidad a la gestión de la vivienda. Hablamos de un sistema fiable que nos ofrece múltiples ventajas gracias al mix de tecnología que emplea y a su autogestión.
Gracias a la Domótica el futuro está al alcance de nuestras manos.